Correr es una de los deportes más sencillos que existen. No requiere de unas instalaciones o un equipamiento complejo para su práctica, solamente tenemos que calzarnos un par de zapatillas y salir a la calle. No en vano es uno de los deportes más practicados por personas de todas las edades en todo el mundo.
Mucha gente comienza a correr con el claro objetivo de perder peso. La buena noticia es que es posible esto y mucho más. Los beneficios del running no solo se limitan a ayudarnos a eliminar los kilos de más.
Ahora bien, como veremos a lo largo del artículo, no hay atajos ni milagros si queremos conseguir nuestro propósito de adelgazar y mejorar nuestra salud cardiovascular.
A continuación, os damos algunas claves para sacar el mayor provecho al esfuerzo de correr.
¿Correr ayuda a adelgazar?
Desde luego que sí, correr quema muchas calorías rápidamente y ayuda a reducir el índice de masa corporal (IMC). Es un ejercicio cardiovascular ya que mantiene el ritmo cardiaco elevado y aeróbico porque requiere oxigeno adicional.
Se pueden perder los kilos no deseados y el exceso de grasa siguiendo un plan de carreras inteligente. Además, no es necesario ser un corredor veloz o muy resistente para ver los resultados. Cualquier persona, independiente de su nivel, puede beneficiarse de la practica de la carrera a pie.
¿Cuántas calorías quemamos corriendo?
Según un estudio de la Universidad de Ohio, en entrenamientos largos, correr quema más calorías que otros deportes como el ciclismo o la natación.
Por cada kilómetro recorrido, se pueden quemar unas 100 calorías de media. En una carrera de 30 minutos se pueden llegar a consumir 360 calorías, lo que equivaldría aproximadamente a 2 horas de en bicicleta.
Existen también, algunas evidencias científicas que sugieren que correr en ayunas (antes de desayunar), ayuda a aumentar la quema de grasas. Sin embargo, hay una advertencia importante: las carreras en ayunas deben realizarse a un ritmo suave durante un período de tiempo relativamente corto (menos de 75 minutos).
¿Puedo adelgazar solamente corriendo?
Como ya hemos visto, correr es uno de las mejores formas de perder peso pero, para obtener buenos resultados, también habrá que incorporar cambios en nuestros hábitos y estilo de vida. El más importante, para ganarle la batalla a la báscula, es realizar una alimentación saludable.
La única manera que existe para adelgazar es alcanzar un déficit calórico, esto es usar más calorías de las que ingerimos. Aunque después de una carrera es normal sentir más hambre de lo habitual, debemos ser exigentes con nosotros mismos y evitar excesos con la comida.
Debemos centrar nuestra dieta en alimentos saludables y a la vez saciantes, como verduras, frutas y proteínas magras.
¿Cuántos días tengo que correr para perder peso?
El running es un ejercicio sensacional para la quema de calorías y el control del peso. Sin embargo, correr durante unos pocos días no ayudará a perder kilos si no se trata de una actividad continuada en el tiempo, es decir, de varios meses. Debemos ser constantes y trabajar duro si queremos conseguir nuestro propósito.
Lo primordial, si nunca hemos corrido, es empezar gradualmente, muy poco a poco. Al principio, seguramente sea suficiente con tan sólo 3 salidas por semana de 30 minutos cada una.
La intensidad del entrenamiento dependerá del nivel de cada persona, si vemos que correr nos agota demasiado podemos empezar alternando andar o trotar con correr.
A medida que nos vayamos encontrando más cómodos en las salidas, podemos incrementar distancias y número de entrenamientos.
Tampoco es necesario hacer siempre sesiones de running, podemos alternar con otros deportes como natación, una sesión de gimnasio, bicicleta,… Esto es lo que se llama entrenamiento cruzado y nos puede ayudar a que alcanzar nuestra meta sea menos monótono.
¿Qué otros beneficios tiene correr?
Además de la ayuda para adelgazar, son muchas las ventajas que obtendremos si incorporamos las carreras en nuestro día a día. Entre ellas podemos destacar:
- Mejor bienestar físico.
- Mejor salud cardiovascular.
- Fortalecimiento de huesos y músculos.
- Sistema inmunológico más fuerte.
- Mejor salud mental y emocional.
- Aumento de la autoestima.
- Ayuda a dormir mejor.
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